Tomar conciencia de la dimensión de esa lacra social que es la violencia de género, lanzar un mensaje de esperanza y apoyo a todas las víctimas y expresar que el principal arma para luchar contra la violencia es la igualdad efectiva, el respeto y el compromiso de toda la sociedad, han sido los ejes de las acciones realizadas por el colegio San Francisco Javier, que tuvieron su culminación en el marco de las celebraciones del Día del Centro.
Así, a las charlas, reuniones y debates que se han venido sucediendo durante las semanas precedentes, con el fin de ir inculcando estas premisas, en el Día del Centro se vivió una emotiva puesta en escena, con una performance donde alumnas y alumnos quisieron mostrar su rechazo a la violencia de género y la certeza en que siempre hay una esperanza para la víctima antes de que la situación se convierta en tragedia.
Zapatos sin dueño, rostros de desesperación y dolor, mientras una puerta violeta permanecía cerrada. Al abrirla, la alegría de recuperar la propia vida, y sobre todo el mensaje de que la igualdad es fundamental para acabar con la violencia, y que es una batalla de todos y de todas, no una cuestión privada.
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